

MEMORIAL SHITMAN TOUR
Una vez más nos encontramos en la ruta, camino hacia la costa atlántica. Sin embargo, esta vez sentimos la extraña sensación de ausencia y, al mismo tiempo, la motivación que este tour costero nos provoca. Teniendo siempre presente al Zanel en cada sesión, cada fuego prendido y en cada birra que descorchamos.
Los primeros autos en partir encontraron en Villa Gesell y en la HosterĂa Novi Zagreb su primera parada. A pesar de la lluvia persistente que nos impidiĂł andar, la calidez de nuestros anfitriones Juanato, Juance y Maca hizo que pasáramos unos dĂas de lujo. Con la salamandra siempre encendida, ricas comidas, buenas anĂ©cdotas y unas largas frescas, comenzamos a sentirnos realmente de tour nuevamente. La siguiente parada; Santa Clara.
Como era de esperarse y para hacerse presente en su segunda ciudad natal, Santa Clara nos recibiĂł con un sol radiante. Nos encontramos con el resto de la banda que habĂa salido de Quilmes y que ya habĂa secado la pista para disfrutarla. Con sus chupadas tranis y el chanel en los cuarters, nos deleitamos con una agradable tarde de sol y skate. DespuĂ©s de un recorrido por la ciudad, nos dirigimos a Chapadmalal, donde tendrĂamos todo el fin de semana por delante.
Una vez llegados e instalados en nuestro destino, a pesar de las lluvias intermitentes que intentaron acaparar protagonismo en el tour, las ganas de andar siempre fueron superiores y nos motivaron a encarar hacia el DIY local, Paradise. AllĂ, pasamos una hermosa tarde, se vieron lindas pruebas y disfrutamos de un regalo especial: un arcoĂris sobre el mar que parecĂa estar destinado solo para nosotros, enviado desde lo más alto. Para culminar el dĂa, pasamos por “BirraySkate”, donde Beto y Flor nos refrescaron con sus deliciosas cervezas artesanales. LlegĂł el domingo y nuestro destino fue “LA PILE”, un dĂa soleado lleno de encuentros, donde nos recibiĂł la banda de Marpla a fuego prendido y mucho skate en el divertido Bowl de cemento, sumado al flow de toda la crew que de a poco se fue desoxidando y se soltĂł a andar.
Agradeciendo siempre a los anfitriones que nos recibieron, a los que nos llevaron y quienes nos hospedaron en sus hogares costeros. Cerramos un tour lleno de nostalgia por algunos momentos, pero siempre teniendo presente que los recuerdos nunca mueren y que las anécdotas son eternas. ¡Zanel4ever!
Texto y fotos por Alejo Report
